¿Qué es el blended scotch whisky?
Cómo se hacen las mezclas
La mezcla del Scotch Whisky es tanto un arte como una ciencia. En Johnnie Walker, esta es una habilidad, una dedicación y un conocimiento profundos del whisky y sus variedades que se remonta a dos siglos atrás hasta las primeras mezclas del fundador.
Hacer blended Scotch comienza de la misma manera que cualquier single malt whisky.
Comienza con el malteado: agregar agua caliente al grano para convertir el almidón en azúcares. Una vez que está listo, el cereal se seca en un horno, a veces con turba, lo que le da un toque ahumado. Entonces es hora de moler el grano, extraer esos azúcares tan importantes con agua caliente y prepararse para la fermentación. Al agregar levadura se elabora una especie de cerveza, que se destila dos veces en un gran recipiente de cobre llamado alambique. Esto intensifica el sabor.
Luego se transfiere a barricas de roble para madurar durante un mínimo de tres años. Estos barriles juegan un papel muy importante en el sabor del whisky. Por lo general, ya tienen bourbon, a veces jerez o incluso vino o cerveza. Una vez limpias, las barricas se tuestan, lo que abre las fibras de la madera para añadir sabor y color.
Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el single malt whisky y el blended scotch whisky? Las mezclas combinan diferentes tipos de whisky para producir un whisky escocés con una gama más amplia de sabores que se pueden disfrutar de diversas formas. Al hacer un whisky de malta única, el objetivo es crear algo típico del estilo de esa destilería única. Comparar los dos tipos diferentes realmente no tiene sentido, no están destinados a ser iguales. Depende de los sabores y el estilo que prefieras. Después de todo, para llamarse escocés, los whiskies deben madurar en Escocia. Así que no importa si son de mezcla o de malta única, existen estándares estrictos para ambos.
Mezclar whisky requiere pasion, creatividad y vision.
Algo que nuestro pequeño equipo de expertos mezcladores tiene en abundancia. Están dirigidos por el maestro mezclador de Johnnie Walker, Jim Beveridge, que puede recurrir a nuestras existencias inigualables de 10 millones de barriles de whiskies escoceses de un solo grano y de una sola malta. Conoce el carácter de cada uno, desde los ingredientes utilizados hasta el tratamiento de las barricas, y también cómo reaccionan cuando se combinan. Pero crear una mezcla excepcional es algo más que un conocimiento exhaustivo. Es una forma de arte.
Nuestras mezcladoras de whisky crean estructura, forma y significado en cada sorbo. Y más que eso, reproducen esa misma calidad y sabor una y otra vez, por lo que el estándar de nuestro whisky nunca cambia. Con un ojo en el pasado y el otro en el futuro, nuestro equipo continúa creando los whiskys más queridos de hoy, mientras explora, prueba y formula nuevas variedades continuamente.
